Aunque de floración bastante pasada (dada la fecha) la mayoría de las plantas eran muy vigorosas con varios ejemplares que sobrepasan los 30 cm y aún pude conseguir alguna que otra foto aprovechable. La única amenaza que pesa sobre esta población es el pastoreo. Las lluvias abundantes y mesuradas de esta primavera han propiciado la abundancia de pastos, por lo que los pastores no se han visto obligados ha llevar sus merinas por estos pagos como otros años , y esa creo yo que es la razón de que no las hayamos visto antes pues probablemente en otras primaveras muchas plantas han sido consumidas por el ganado.
Ricardo Vázquez Hernández